El desarrollo del municipio: una oportunidad estratégica de crecimiento

 

La manera más conveniente de lograr un crecimiento sostenido que se refleje en los bolsillos de los mexicanos, contribuyendo a erradicar la pobreza, es el desarrollo estratégico del municipio como pieza fundamental de la estructura político-social del país.

 

No es casualidad que el municipio sea la base estructural para el desarrollo del país en nuestra Constitución. El municipio es el gobierno más cercano a la población, siendo la parte del andamiaje institucional que mejor conoce las necesidades de su territorio, de ahí y por eso puede establecer de manera puntual sus prioridades, la vocación productiva y oportunidades de la población a la que sirve.

 

Es una sensación contradictoria estar en algunas ciudades, constatar su crecimiento territorial y poblacional, saber que en pocos años alcanzaron estándares de prosperidad, que existen oportunidades de desarrollo para su población, confirmar sus niveles relevantes de intercambio comercial y, por otro lado, presenciar ciudades sin ordenamiento territorial, carentes de servicios públicos, de espacios de esparcimiento, sin bases para un desarrollo económico.

 

El desarrollo estratégico de un municipio depende en gran medida de su infraestructura, de adecuadas vías de comunicación, de su fácil acceso, ya sea por mar, tierra o aire.

 

Un municipio debe impulsar el desarrollo en todas sus localidades para lograr una sinergia importante al interior y no únicamente en la cabecera municipal y localidades aisladas.

 

Un punto importante es el de los servicios básicos como agua potable, drenaje y alcantarillado, energía eléctrica, planteles educativos, puentes y caminos, rutas de comunicación en óptimas condiciones para conectarse al interior del municipio.

 

Es necesario reducir la brecha digital para brindar a las nuevas generaciones la mismas oportunidades de interacción con otras personas a distancias o con el mismo gobierno, hay que hacer permanente la prestación servicios de telefonía fija, móvil y  gubernamentales en línea para toda la población.

 

Parte fundamental es la propuesta de desarrollo basada en su vocación productiva, sin dispersar los esfuerzos en muchos frentes. En otras palabras, si un municipio tiene la capacidad, la experiencia y los medios para producir algo en específico y darle valor agregado, debe otorgar todo el apoyo necesario a su población para impulsar este rubro, cuidado el entrono ecológico, para hacerlo redituable, sostenible y con posibilidades de expansión.

 

La oferta para atraer inversión nacional y extranjera debe impulsar la cadena productiva local y proteger a la mano de obra del municipio y región.

 

Sin duda la planeación es relevante, de ahí que los planes municipales de desarrollo deben encontrarse en sintonía y contribuir con el Plan Estatal de Desarrollo y a su vez con el  Nacional. En este punto podemos ver la importancia de seguir reforzando el «Pacto por México» que impulsó el presidente Enrique Peña Nieto para combinar los esfuerzos de los tres niveles de gobierno, para dar el impulso en una misma dirección, la del desarrollo y erradicación de la pobreza.

 

Es una necesidad primordial del municipio planear el crecimiento urbano de la cabecera municipal y las localidades en desarrollo, para evitar problemas de transporte y de tránsito, y para contar con espacios públicos suficientes y bien ubicados en pro del esparcimiento de la población.

 

La autosuficiencia alimentaria de nuestro país a través de sus municipios y la erradicación de la pobreza no pueden esperar más, por eso es indispensable un municipio bien comunicado, con educación de calidad, sin brecha digital, con todos los servicios mínimos garantizados, con transporte suficiente y de calidad, un municipio productivo en el que sus integrantes no tengan la necesidad de migrar a ninguna otra parte.

 

Es mi trabajo como Senador de la República lograr, al igual que mis compañeros, un marco jurídico eficaz que permitan acciones para cambiar la situación de miles de mexicanos que sólo desean una oportunidad de vivir mejor, con paz social y la tranquilidad que otorga el tener en el bolsillo lo necesario para vivir dignamente.

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